Cambiar de vida sólo por más libertad
Maldito sea el momento en que decidí renunciar al trabajo y vender todas mis cosas para salir de viaje.
Tengo 34 años, estoy totalmente loca.
La estabilidad económica que tantos años me costó lograr la tiré a la basura.
¿Quién me garantiza que alguna otra vez voy a poder tener nuevamente un auto o una casa montada?
Soy una estúpida, me equivoqué y, lo peor, es que me lo avisaron.
Amigos, familia, casi todos me dijeron que era una tontería lo que estaba haciendo y que no lo necesitaba.
Tengo la rara característica de dejar anotado en libretitas distintas ideas, emociones o sensaciones que me resultan demasiado fuertes o importantes por alguna razón.
Revisando papeles viejos di con este «casi pánico» que me agarró dos días antes de salir de viaje.
Recuerdo la angustia que tenía.
Amaba mi trabajo, trabajaba poco y ganaba bien… ¿Por qué había renunciado?
Recuerdo muy claramente cómo por mi cabeza pasaban una y otra vez todos estos miedos.
Mil miedos que se oponían a un solo deseo y que hacían que la balanza me dijera casi a gritos “TE EQUIVOCASTE”.
Ufff que mal nos educaron, qué poco autónomos nos formaron.
Siempre dependemos. Dependemos de un sueldo, del tráfico, de las ofertas del banco, de la autorización de un jefe, del reloj, de nuestro entorno.
Acceder a la libertad
Hace más de tres años que llevo una vida nómada y estoy segura de haber tomado la decisión correcta para mí.
Comprobé en carne propia que luchar por un sueño, un ideal o un deseo, incluso arriesgando tanto, debería ser lo más importante para cualquier persona.
Enfrentarme a mis temores me permitió entender mil cosas que jamás me hubiera siquiera preguntado.
Hace dos años que me redefino una y otra vez.
Hoy entiendo que yo no “soy tal o cual cosa”, sino que estoy siendo a cada decisión lo más yo que pueda ser.
Me brindó la posibilidad de saber que sólo dependo de mi… y eso, eso créanme que es mucha libertad.
Hablo de libertad real… ni de la que hablan los noticieros ni la que venden las grandes marcas, hablo de la libertad como resultado de la autonomía.
De la libertad de decidir a cada paso y cada acción.
Libertad que deviene de la responsabilidad más importante de cada ser humano, la responsabilidad de “hacer reales los sueños propios”.
Esta soy yo, esto es lo que creo y así es como vivo.
Hoy, a más de tres años de mi partida, muchos amigos y familiares son felices con mi felicidad, aunque debo confesar que algunos siguen sin entenderlo (pero hay lugares donde uno ya no puede intervenir).
Leo estos miedos viejos escritos en una hoja y no puedo menos que sonreír, quizá con un poco de orgullo, de aquella mujer de 34 años que teniendo mil miedos y mil cosas para perder decidió arriesgarse, decidió salir a enfrentar el mundo una vez más.
¿Qué es eso que te permite sentirte, quizá en lo más íntimo, orgulloso de vos mismo?
¿Cuál es ése deseo que te moviliza a construir para hacer de un sueño una realidad?
Ponerlo en palabras siempre lo hace un poco más real y me encantaría conocerlos.
Si querés aprender cómo hacerlo de forma online leé esto.
Wuaooo, hay mucha cosas que comentas que me gustaria aplicar. Otras cosas que no (algo personal).
Pero aún así me gustaría experimentar muchas cosas «locas». A lo que uno le llama «loca», es a lo que esta fuera del cubo de protección (entre comillas – lo del cubo de protección).
A la mayoría los paraliza, pero a otros sus miedos los lleva hacer muchas cosas al mismo tiempo y sus resultados no llevan a nada (Y a veces también pierden todo – aún estando dentro del cubo y por esa razón no se arriesgan a salir).
Me gusta tu Publicación (si se puede decir así). Y me gustaría seguir leyendo de como disfrutar y superarme, al mismo tiempo que se esta viajando sin parar (Sin tener la preocupación de perder tu trabajo u otras cosas).
Ojala pueda tener el placer de conocer una persona que ya este experimentando este mundo y haya tenido una experiencia por lo menos 1 año o 2.
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Me encanta viajar, y algunos de mis sueños los e cumplido – Pero otros sueños no. Por miedo de no saber que hacer en X situaciones.
Ervin, lo más importante para acceder a la libertad es vencer el miedo. Abrazo.
Que bonita tu frase. .hay lugares enn los que ya no se puede intervenir…
Siempre hay cosas o acontecimientos que escapan a nuestras decisiones… Pero de nosotros depende nuestro accionar diario. Abrazo María.
Wow Mina, te admiro y me cargo de energía. Creo que aún estoy peleando en el lado del miedo. Quisiera ser tan valiente como tú.
Hola Mar, ante todo muchas gracias por tus palabras y que bueno que este blog sirva para cargarte de energías… 🙂 es una de las cosas que queremos.
Con respecto al miedo, tené en cuenta que el miedo te va a acompañar siempre en todo aquello que hagas e implique arriesgar algo, y no es malo leé esta nota, quizá te sume un poco más.
Un abrazo fuerte y arriésgate, porque es la única forma de lograr cosas diferentes.
Sos y son grosas! Las admiro! Sigan Adelante!!!! Las quiero
¡Gracias Maty, que bueno encontrarte por acá!
¡Nosotras también a vos, abrazo inmenso! <3
Wooww… tengo 34 ahora y salí de Bs As a ppios de 2015… ahora salí de Roma, y los miedos que escribiste son los que tengo… pero aún asi voy para adelante… haciendome cargo de esta libertad. Saludos!
¡De eso se trata Aru!!
¡Abrazo grande y éxitos con todo!
Yo también tengo una libreta de ideas 😀 ! Solo pasaba a decir q me encantan tus posts aunque nunca comente. Abrazo!
¡¡Muchas gracias Pablo, que bueno saberlo!! 🙂 ¡Te mando un abrazo grande y espero volver a leerte!